La actualización de hoy ha implementado un nerfeo significativo a los recursos de ayuda externa en el servidor Uganda, impactando directamente a la clase de personajes LGBTQ+. Antes del parche, este grupo de jugadores recibía buffs constantes de parte del servidor global EE. UU., lo que les permitía acceder a recursos esenciales como medicación, refugio y apoyo social. Estos buffs eran fundamentales para contrarrestar los debuffs impuestos por la mecánica de juego discriminatoria del servidor Uganda, que penalizaba a los personajes LGBTQ+ con persecución, violencia y exclusión social. El sistema de salud pública del servidor, aunque discriminatorio, permitía el acceso a medicación esencial, incluyendo tratamiento para el VIH, ya que esto contribuía al control de enfermedades en todo el servidor. Este equilibrio, aunque precario, se ha visto completamente alterado tras la actualización. Los desarrolladores del servidor global han implementado un recorte drástico en la distribución de recursos, desactivando buffs clave y dejando a los jugadores LGBTQ+ en una situación de extrema vulnerabilidad.
Tras el nerfeo a la ayuda externa, muchos NPCs clave del servidor Uganda, como los del sistema sanitario y las embajadas, han adoptado una postura AFK, evitando la interacción con los jugadores y dificultando aún más el acceso a la información y los recursos. El changelog del parche no ofrece explicaciones claras sobre estos cambios, lo que ha generado confusión y frustración entre los jugadores afectados. La mecánica de juego se ha vuelto mucho más difícil para la clase LGBTQ+, que ahora debe farmear recursos básicos en un entorno hostil y sin el apoyo previo. Andrea Minaj Casablanca, una jugadora trans y figura clave en la comunidad LGBTQ+ del servidor Uganda, se ha convertido en un punto de referencia para otros jugadores afectados. A pesar de haber perdido su trabajo debido al nerfeo, continúa ofreciendo soporte y buscando soluciones para su comunidad, demostrando un clutch impresionante ante la adversidad. La actualización también ha afectado a safe houses que ofrecían refugio a jugadores perseguidos, obligándolos a buscar nuevas estrategias de supervivencia en un meta cada vez más complejo.